El domingo pasado, o sea el día 13, a primera hora del día un auto negro de alta gama se estaciona en la vereda de Manuel Porcel de Peralta al 800 casi Santo Tomé mano izquierda frente a la manzana de la casitas, ex predio Aerolíneas Argentina. Lo llamativo que el auto tenía un importante impacto en la parte delante derecha. Ese domingo un vecino se pasó caminando la cuadra tocando el timbre en las casas en buscar de averiguar quien era el dueño del automóvil. Lo que no sabía que quien chocó su auto vive en su mismo edificio. Este vecino indagaba porque había sucedido que ese auto lo chocó cuando su auto estaba estacionado en Arregui entre Bruselas y Peralta.
Los vecinos averiguando más tarde supieron del propietario y la secuencia del choque. Y aún más los métodos mafiosos del propietario del auto.
El auto misterioso en cuestión es un modelo Xitsubishi Calan, auto Test ES, patente BID 511. Su propietario es un hombre de profesión enfermero oriundo de la provincia de Jujuy. Que vive en el edificio de mitad de Arregui, a la vuelta de la comisaría N° 44, pegado a la remisería. Es notorio que este enfermero vecino anda en cuestiones poco legales. Ya que no es el único auto. Tiene en total tres. Y a su vez vuelve pasado de rosca los fines de semana. Pero todo lo hace amparo con acciones mafiosas. Ya que el lunes pasado, cerca de las 5.30 a 6 de la mañana, llegó una persona al auto misterioso. Abrió la puerta, la alarma sonó y enseguida la apagó. Trasladando el auto a la vereda de enfrente a la altura de la gran casa Colonial de Porcel de Peralta. Lo llamativo fue que cambió la patente de su auto de lujo. Lo hizo para no ser reconocido y tener que hacerse cargo del choque que le generó al auto de su propio vecino.
Sería bueno que la seccional a tan pocos metros de los acontecimientos se dedicara a investigar que ocurre con este enfermero adinerado que choca autos y cambia patentes como de medias. Todo con total impunidad.
Sabemos que en este caso se tuvo que hacer cargo de los daños a partir de la solidaridad de otros vecinos que están cansados de su proceder. Gracias a los propios vecinos se supo donde vive el enfermero adinerado que juega a los autitos chocadores en el barrio poniendo en riesgo la vida de la comunidad.
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